Elevado gasto público

gasto publicoLos debates políticos se centran en pelearse unos contra otros sin analizar con seriedad y transparencia el problema del elevado gasto público. Los políticos no quieren enfocar el problema del elevado gasto público en el largo plazo porque anteponen la demagogia electoral y porque solo representan a quien les puso en la lista y no pueden ni quieren votar en conciencia. El partido en el gobierno ha planteado medidas para atajar el déficit a base de deteriorar la economía de la gran masa de ciudadanos asalariados con un aumento considerable de la presión fiscal y deterioro de las condiciones salariales. Quizás había que hacerlo, pero esto no arregla el problema de fondo del insostenible elevado gasto público.

Cada partida de gasto público debería de estar calificada en función de si es necesaria, conveniente o superflua. Y por otra parte también debería estar clasificada en función de que sea recurrente u ocasional. Esto lo entiende todo el mundo y si en el seno de una familia con un presupuesto ajustado se evitan gastos superfluos, o incluso gastos convenientes recurrentes, en la gran familia del sector público habría de hacer lo mismo. La calificación de cada partida de gasto público debería publicarse y aunque pueda ser en muchos casos opinable, para eso está el debate y para eso debería articularse la participación ciudadana, hoy inexistente, adoptando el sistema electoral de circunscripciones uninominales.

Es evidente que gastos superfluos y ocasionales como «la subvención para explorar restos de dinosaurios en Argentina» se eliminan fácilmente, pero se trata de analizar seriamente partidas de gasto público que pueden suprimirse. Por ejemplo, el Senado es superfluo, lo mismo que las ayudas al cine que sean recurrentes, o las subvenciones a partidos políticos, sindicatos y patronales, máxime si a menudo tenemos noticia de que son objeto de desviaciones fraudulentas. Y a lo largo y ancho de las administraciones públicas hay partidas de gasto perfectamente suprimibles. Este ejercicio es el que se hace en cualquier empresa que tiene que ajustar su presupuesto. Y lo que no hace es confiar la mayor parte del esfuerzo de ajuste a un incremento de los ingresos. Primero hay que atender a lo que es necesario, después a lo que es conveniente si puede pagarse y desde luego eliminar lo superfluo.

Himno nacional

Himno nacional

El himno Nacional «Aúpa la Roja» para glosar los éxitos de la selección española de fútbol.

El fútbol es lo único que une a los españoles bajo la bandera nacional sin mayor distinción de nacionalismos ni ideologías y este hecho hay que capitalizarlo para poner una letra al Himno Nacional que a nadie le parezca que ofende ningún sentimiento. Es lamentable que hasta la fecha no haya sido posible cantar el Himno Nacional y ahora se presenta una ocasión histórica con motivo del campeonato mundial de Brasil. Es una buena ocasión para ponerle letra al Himno Nacional dejando a un lado cualquier matiz político y cantar «Aúpa la Roja» según la letra que expongo a continuación. Haciendo “click” en la imagen de la bandera se muestra un vídeo cantando el himno.

Aúpa la Roja – que siendo campeona-delfútbol mundial-no cesa de triunfar

Aúpa la Roja-que con el tiki taka-sabe encontrar-el camino del gol

Aúpa la Roja-de los Iniestas, Xavis,-Ramos y Piqués,-Casillas y Busquets

Todos unidos-cantemos con Reina-los triunfos que la Roja-nos conseguirá

Los premios Goya del mundo del cine

Premios GoyaNo entiendo que los premios más destacados en el mundo del cine español se denominen Premios Goya ya que el cine nada tiene que ver con el genial pintor. Se podían llamar Premios Isbert lo que sería más acorde con la materia y además rimaría con el ministro Wert cuyo nombre utilizan los cineastas tanto como el de Goya aunque con diferente motivación.

Tampoco entiendo que el cine esté subvencionado con dinero público y que además tenga que tener un IVA reducido como si se tratara de un artículo de primera necesidad.