Con el paso del tiempo

El paso del tiempoCon el paso del tiempo descubres muchas cosas que ignorabas pero que sin embargo podrías haber intuido o deducido. Son enseñanzas difíciles de transmitir que normalmente se aprenden cometiendo errores, porque como dice el dicho popular “no se escarmienta en cabeza ajena”.

Equivocarse es casi un mandato divino porque estamos abocados a tener que decidir sobre nuestros actos, sin tener tiempo suficiente para pensar, mediante reacciones prefabricadas del Subconsciente. Nuestras reacciones están en parte programadas en nuestros genes, en parte son pautas extraídas de nuestras experiencias y en parte son reacciones inducidas subliminalmente por el ambiente y por terceros.

El razonamiento y el pensamiento consciente son posteriores a la acción y sirven para digerir las experiencias y proporcionar al Subconsciente información para poner a punto los reflejos. También para discriminar sobre las influencias externas y sus consecuencias. Pero el razonamiento consciente está siempre cercado por la duda mientras que las reacciones emocionales se manifiestan espontáneamente.

Al final, con el paso de los años, te das cuenta de que la vida es un ejercicio continuo de aprendizaje para comprender la realidad y asimilar las pautas, provisiones y cautelas que guían tus impulsos emocionales.

Despertar del sueño olímpico

sueño olimpicoAhora que han pasado unos días del despertar del sueño olímpico, nos damos cuenta de que era un imposible. En primer lugar ya era cuestionable la primera candidatura de Madrid en competencia con Londres, teniendo en cuenta sobre todo que hacía poco que la Olimpiada tuvo lugar en Barcelona que no cabe duda de que es parte de nuestro país. Perdida la votación por un muy estrecho margen, parecía que la próxima era ya la nuestra, sin querer darnos cuenta que era probable que las dos próximas olimpiadas correspondieran a América y a Asia.

Sin embargo insistimos otra vez y además se hicieron cuantiosas inversiones anticipando un éxito en la elección de Madrid que era más que improbable. La tercera vez consecutiva era una quimera porque resulta difícil batir a Tokio cuando el turno está más hacia Asia. Además, la cuestión de que el 80% de la infraestructura estaba ya hecha, lejos de ser un factor positivo era disuasorio para un ejercito olímpico que vive de la dinámica de revisar las instalaciones en curso. La presentación final no era determinante, pero merece destacarse la buena presentación del Presidente de la Comunidad de Madrid y del Príncipe, ambos con mejor imagen expresándose en ingles que cuando lo hacen en español.

Queda también la preocupación de haber invertido en infraestructuras que han resultado ser innecesarias y su contribución a la deuda tan elevada que tiene el Ayuntamiento de Madrid. Los sueños faraónicos hay que pagarlos y lo malo es que esa parte nos corresponde a los ciudadanos sin haber sido consultados al respecto. El despertar del sueño olímpico parece que también comienza a desinflar el proyecto Eurovegas que contaba con el empujón que la convocatoria olímpica hubiera supuesto para sus hoteles. Aunque uno no sabe si es bueno o malo que Madrid acabe siendo la ciudad verbenera de Europa.

Propuesta de reforma fiscal

mileuristasHace unos días hemos visto en los medios una propuesta de reforma fiscal de FAES, entidad dirigida por el Sr. Aznar que se financia con fondos públicos. Propone entre otras cosas subir el IVA y reducir el IRPF dejándolo con dos tramos del 25% y del 35%, pero no dice nada del mínimo exento que propone, lo que es decisivo para que la gran mayoría de los españoles pueda ver si con lo que proponen va a pagar mas o menos impuestos. Sin embargo, quienes tienen rentas altas tienen claro que con la propuesta pagarían muchos menos impuestos.

La propuesta tiene toda la apariencia de expoliar todavía más a los mileuristas para beneficiar directamente a la clase acomodada. No propone nada para recortar gastos y por consiguiente se trata de redistribuir la contribución fiscal, y si los ricos salen directamente beneficiados tendrá que ser a costa de la clase media para que salgan las cuentas, lo que se vislumbra con la ocultación de cual sería el mínimo exento que compara con el actual. En el IRPF correspondiente al año 2012, un 81,58% declararon ingresos inferiores a 30.000 €, que es una gran mayoría que estaría muy afectada si lo que se trata es de eliminar la progresividad del impuesto para rentas superiores. Especialmente sangrante es proponer subir todavía más el IVA que es un impuesto que golpea especialmente a los mas desfavorecidos.

Ya es de entrada poco fiable que una propuesta de reforma fiscal que pretende ser independiente proceda de una entidad que se financia con dinero público. Podía haber empezado por proponer una reducción drástica de los gastos, entre ellos eliminando subvenciones como las que dicha entidad recibe. La aproximación elitista que hace FAES al sistema fiscal invita a pensar que el acrónimo representa más a un revival de la famosa institución joseantoniana que a la Fundación para el Análisis y Estudios Sociales, lo que además no desentona con la imagen del personaje.

Alcohol en el Congreso

alcoholicosEstos días mucho se ha hablado de el alcohol en el Congreso y de que se despachan «gin and tonics» y «whiskeys» a precios por debajo del de mercado y lamentablemente la crítica se ha centrado en que el servicio de bar está subvencionado, sin cuestionar la mayor de que en el Congreso se despachen bebidas alcohólicas. No parece oportuno que los Diputados desarrollen su labor entre copa y copa, y desde luego no es habitual que en cualquier centro de trabajo el personal de servicio beba alcohol. Es cierto que por lo general deben de aburrirse bastante, dado que la mayoría de los diputados parece que limitan su tarea a votar en el sentido que les «ordena» su jefe de fila, pero es preferible que jueguen con los computadores que también tienen con dinero público como ya se ha visto en algún caso.

Bromas aparte, puestos a ser consecuentes, debería preocuparnos más que un Diputado debata y vote bajo los efectos del alcohol que el que un ciclista suba el «Tourmalet» dopado. Ninguna de las dos tareas debe de hacerse estando dopado, pero las decisiones del Estado que afectan a todos los ciudadanos parece que tienen mayor trascendencia. No creo que hoy en nuestro país el alcohol en el Congreso sea un problema relevante, aunque pueda haber quien piense que influye en el tono agresivo de las intervenciones y los reproches continuos que se hacen unos a otros. Algún día, en algún país, se extenderá a los protagonistas de las grandes decisiones el control antidoping que se aplica hoy a los deportistas.

El arte de la pintura está marginado

arte de la pinturaEl arte de la pintura servía en siglos pasados para transmitir a la posteridad imágenes de personas, hechos y sucesos para complementar los relatos de los historiadores. Entonces dominaba la necesidad de que el cuadro del artista tuviera una técnica y una composición lo más fiel posible a la realidad, aunque eran los ojos del artista los únicos que daban fe de las escenas que inmortalizaban. El artista tenía también margen para comunicar a su obra signos de su sensibilidad interior, pero esto es un valor añadido que solo se ha ido apreciando con los años.

En la actualidad sigue siendo importante la técnica y la estética de la obra pero además el artista tiene que transmitir emociones, una especie de sensibilidad subliminal que hace que la obra sea agradable de contemplar por encima del hecho de que reproduzca fielmente una figura o un paisaje, porque para esto ya hay medios más eficaces. El arte es ahora más que nunca una comunicación entre el pintor y el observador y es éste quien ha de juzgar cuán importante es una obra. Nadie debe ponerse en medio para decir al observador si le tiene que gustar la obra.

Pero por desgracia hay interpretadores oficiales, que viven de opinar sobre el arte, que deciden lo que es bueno y lo que es malo, y también hay todo un engranaje de galerías, museos, certámenes, coleccionistas, …etc., que viven del arte de la pintura y necesitan que el arte sea escaso y muy bien valorado para generar suficiente dinero para mantenerlos. Muy pocos pintores pueden entonces vivir del arte porque les resulta muy difícil entrar en ese engranaje. Hay muy pocas oportunidades para un artista independiente de comunicarse con otro público observador aparte del entorno social más allegado. Tendrían que promocionarse más oportunidades de poner en contacto las obras de los artistas con el gran público en convocatorias abiertas sin la intermediación de los “controladores oficiales” del arte.

Autonomía e independencia

autonomia e independenciaLo que no pueda resolver uno mismo nadie lo va a solucionar salvo casos muy concretos. Aparte de la tutela de los padres y de los lazos familiares más próximos estamos bastante solos en la sociedad y nadie va a echarnos una mano gratuitamente. En realidad todas las ayudas generan dependencias e incluso frustraciones, por lo que pedir ayuda es un último recurso.

En las relaciones personales no suele haber por lo general intereses ni compromisos, sino que simplemente se comparten momentos y ocupaciones. Si alguien hace un favor, lo normal es que sea correspondido con otro favor cuando se presenta la ocasión.

Sin embargo el favor genera dependencia si hay necesidad de pedir a alguien que resuelva algo sin estar seguro de poder corresponder. Cuando se contrata como un servicio, la contraprestación se compensa con dinero, pero cuando se trata de un favor queda siempre una deuda pendiente por mucho que no sea la intención de quien echa una mano.

La forma de convivencia más normal y menos comprometida requiere tener la autonomía e independencia necesarias para resolver los problemas por nuestra cuenta sin endosárselos a los demás sin nada a cambio y sin pedir favores que sean molestos de satisfacer.

La Marca España

La marca EspañaEn nuestro país siempre nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena. Ahora que pasamos por circunstancias adversas de paro, déficit, deuda, falta de crecimiento, destrucción de puestos de trabajo, corrupción, y como consecuencia de todo ello de falta de credibilidad, se nos ocurre sacar pecho con la promoción de la Marca España. No es que esté mal promocionar la imagen del país pero había que haberlo hecho en circunstancias favorables y no empezar ahora a contrapelo.

Las muchas empresas españolas que han adquirido prestigio internacional no necesitan a la Marca España para seguir teniendo éxito, entre otras cosas porque se han diversificado y solo tienen en el país un cierto porcentaje de su riesgo. Es para ellas más bien un lastre. Y para las empresas que plantean su expansión internacional o que buscan inversión extranjera, no parece que el intangible de una simple promoción de marketing pueda cambiar el proyecto económico ni la credibilidad de sus cuentas.

Por otra parte, el concepto de España es por desgracia «discutido y discutible» (en expresión no lejana del anterior Presidente del Gobierno) y políticos nacionalistas con importante representación lo discuten y desafían abiertamente. No hay ni siquiera unidad de mercado en el país y en el exterior operan delegaciones comerciales de varias Autonomías que parecen contradecir la idea de la Marca España. Solo la Selección Nacional de Fútbol ha conseguido que la idea de España sea indiscutible para la mayoría de los ciudadanos, y eso porque su promoción se hace desde los éxitos y no desde las horas bajas que tantos años sufrió.

Quizás la mejor promoción que podría hacerse de la Marca España, aparte de arreglar los problemas de fondo, sea apoyarse en la buena racha de la Selección de Fútbol y dar por fin una letra al Himno Nacional que todos puedan cantar con pasión y devoción como si fuera nuestra Marsellesa.  Dejo aquí el enlace a la propuesta de Himno Nacional que ya hice el pasado 1 de julio.

Vivir en el siglo XXI en occidente

siglo XXIVivir en el siglo XXI en occidente es un privilegio que compensa con creces los contratiempos de la vida diaria. No es fácil de entender que quejarse de todo y de todos se haya convertido en el deporte nacional, y que estar indignado y no ver el lado positivo de las cosas sea el estado mental que está de moda. Es cierto que hay muchos motivos de disconformidad en el transcurso de la vida diaria pero hay que ver las cosas con la perspectiva correcta.

Los que tienen el privilegio de vivir en un país occidental y protestan de todo por sistema tendrían que tener en cuenta que la población mundial crece en 1000 millones de personas cada trece años y que este crecimiento se produce en países pobres donde todavía hay gente que muere de hambre. Pensar que podrían haber nacido en alguno de los países que nos vienen a la mente y que no viene a cuento señalar. Y si esta comparación no es suficiente podrían simplemente pensar que podían haber nacido hace cien años, con las condiciones de vida que tuvieron nuestros abuelos. No se puede ignorar que vivir en el siglo XXI en occidente es un privilegio que debería hacernos ver siempre el lado positivo de las cosa a la hora de afrontar los problemas de la vida diaria.

El 11-M sigue sin estar claro

El 11 MAunque hace nueve años del 11-M muchos ciudadanos creen que sigue sin estar claro. Las bombas acabaron con la vida de 192 personas y dieron un vuelco electoral llevando al PSOE al poder, pero los eventos de aquel día ofrecen algunas dudas que todavía no se han disipado aunque haya una versión oficial y una «verdad» judicial.

El escenario de la tragedia se liquidó en dos días con la destrucción de los trenes, casi tan rápido como el fregado que hicieron a los marqueses de Urquijo después de ser asesinados. Los ejecutores materiales, supuestos extremistas islámicos, evitaron suicidarse con las bombas, como suelen hacerlo en el 99% de sus atentados, lo que hubiera sido mucho más sencillo, y sin embargo decidieron suicidarse todos juntos en fecha posterior. De los sujetos que fueron imputados una parte considerable resulta que eran confidentes de la policía y los que están en la cárcel son personas de escasa entidad que desconocen quien inspiró la actuación.

Estos hechos y algunos otros no están convincentemente explicados en la versión oficial. La cuestión de si ETA estuvo involucrada resulta irrelevante, pero la controversia que generó fue una cortina de humo que desvió la atención y descentró la oportunidad de enfocar el asunto de forma más ortodoxa y desapasionada para que la verdad se abriera camino por sí sola. Desde el principio se empeñaron en establecer rápidamente la versión oficial, no se sabe si para ocultar algunos aspectos de la verdad o por puro paternalismo piadoso. Esperemos que algún día comiencen a aclararse las cosas.

Las subvenciones al cine son residuos del pasado

subvenciones al cineCon un criterio objetivo, desprovisto de ideología y de preferencias personales, no se puede entender porque hay que destinar subvenciones al cine. Es evidente que se trata de residuos del pasado, de la época de la economía dirigida, para impulsar el desarrollo de una industria cinematográfica. Ahora la industria ya está desarrollada y cosecha éxitos internacionales. Los actores y comparsas van de certamén en certamén luciendo sobre las alfombras smokings y trajes largos de Guzzi, Armani…etc. en un show permanente de lujo y «glamour».

Parece ser que este año el cine recibe en nuestro país unos sesenta millones de euros de subvención. Este dinero, según declaraciones de expertos, se destina en buena parte a subvencionar producciones que en muchos casos no pasan de ser proyectadas en una sala una o dos veces, lo suficiente para cumplir con las bases estipuladas. También parece que se destina a pagar galas de alfombra roja a la élite de la industria del cine, que en el pasado más reciente correspondía haciendo propaganda a sus protectores.

Ahora siguen recibiendo subvenciones, aunque menos, pero continúan por inercia haciendo propaganda política, ahora a contrapelo, con lo que ponen en bandeja la decisión de eliminar subvenciones y dejar que sea el mercado quien apoye la industria cinematográfica según la calidad de sus producciones. De todo esto, lo que menos entiendo es que se utilice el nombre de Goya, que era un pintor que nada tiene que ver con el cine, para galardonar a los actores y directores que destacan.